La Comisión Europea ha presentado hoy la Ley de Servicios Digitales, que establecerá nuevas normas para las empresas digitales dominantes en el mercado, como Facebook, Google y otros. Se supone que la tan esperada Ley de Servicios Digitales unificará el Mercado Único Digital, creará control para las plataformas en línea y asegurará una competencia justa, pero no cumple con las expectativas deseadas. El 21 de octubre, los eurodiputados y eurodiputadas habían pedido a la Comisión de la UE que presentara un marco jurídico claro para las plataformas en línea, que formulara directrices para hacer frente a los consejos sobre contenido ilegal y que pusiera fin a la arbitrariedad en el bloqueo y la eliminación de contenido por parte de las plataformas en línea. El anuncio de hoy da inicio a las negociaciones entre la Comisión, el Parlamento Europeo y el Consejo.
Sobre ello, Ernest Urtasun, eurodiputado de Catalunya en Comú, vicepresidente del grupo Verdes/ALE en el Parlamento Europeo ha comentado:
“Acogemos con satisfacción la iniciativa de la Comisión Europea de poner fin a la barra libre a los gigantes de Internet y hacer que las plataformas en línea se responsabilicen de cómo difunden el contenido y cuándo eliminan contenido de los usuarios. Esto es un buen primer paso para una mayor transparencia y para poner fin al modelo empresarial basado en la polarización y que conduce a un contenido cada vez más extremo, a noticias falsas y teorías de la conspiración. También nos complace que la Comisión haya escuchado nuestra propuesta a favor de procedimientos claros y transparentes sobre cómo manejar el contenido en línea.
“Está claro que las actuales herramientas de competencia no son adecuadas para los mercados digitales. Nuestra sociedad se está volviendo dependiente de un número muy pequeño de plataformas, que tienen un enorme poder sobre sus competidores y consumidores. La Comisión no ha logrado limitar la supremacía de mercado de los monopolios tecnológicos. Aunque hay algunas buenas propuestas, no se está abordando la cuestión clave: la interoperabilidad debe convertirse en el estándar de todas las plataformas de comunicación. La Comisión necesita poderes para intervenir y evitar que se formen monopolios, y así lo defenderemos en las próximas negociaciones”.
“La publicidad personalizada en línea analiza y vincula nuestro comportamiento en Internet y convierte los intereses privados en beneficios para Google, Facebook y compañía. Lamentablemente, la Comisión no se ha atrevido a poner fin a esta práctica comercial desleal y a sumarse a la demanda del Parlamento Europeo de una limitación estricta de la publicidad dirigida y una prohibición de la publicidad de comportamiento no consensuada en contextos cruzados”.
“Internet debería estar centrado en las personas y debe tener reglas que protejan sus derechos fundamentales. En la práctica, eso significa garantizar un cifrado sólido, salvaguardar los derechos fundamentales, dar a las personas la posibilidad de permanecer anónimas en línea y prohibir la publicidad no consentida. Los filtros de carga socavan los derechos fundamentales, la libertad de los usuarios y usuarias debe ser protegida en este sentido”