Anoche, la Comisión Europea aprobó que se destinaran fondos públicos para la Banca Popolare di Vicenza y Veneto Banca. Las ayudas ascienden a 4.800 millones de euros en efectivo además de 12.000 millones en garantías estatales para proteger de las potenciales pérdidas de los acreedores y depositantes. Después de que la Comisión Europea rechazara la denominada “recapitalización preventiva” opción preferida por el Gobierno italiano, se inició un procedimiento nacional de insolvencia. La ayuda estatal aprobada por la Comisión se ha concedido sobre la base de la notificación de ayuda bancaria posterior a la crisis (La Comunicación de 2013), que permite a todos los acreedores preferentes quedar libres de toda responsabilidad.
Sobre esto Ernest Urtasun, ponente en la sombra del grupo Verdes/ALE en el paquete de reducción de riesgos bancarios ha comentado:
“Es inexplicable que se estén incumpliendo las normas europeas diseñadas para evitar que el dinero público rescatara bancos. La decisión del rescate en Italia es puramente política y no se base en los nuevos marcos legales, esto tendrá consecuencias negativas para la credibilidad de la Unión Bancaria.
Los bancos en Italia se beneficiarán de una refinanciación favorable para las operaciones de riesgo porque los inversores pueden asumir que el gobierno los protegerá, cosa que supone una competencia leal. Se podría haber garantizado un sistema de ayudas para todos aquellos ahorradores a las que les colocaron de forma fraudulenta productos de riesgo, pero sin evitar que los acreedores se libraran de toda responsabilidad. Así, serán los y las contribuyentes quienes rescatarán a los millonarios y los inversores financieros.
El BCE como Supervisor Bancario, la nueva Autoridad Europea de Resolución, las SRB y la Comisión Europea han colaborado para hacer posible esta elusión de las normas.
En la revisión en curso de la legislación bancaria, el Parlamento Europeo debe tomar medidas para cerrar las lagunas que evitan la plena aplicación del principio de responsabilidad. El fracaso del supervisor en el caso del Banco Popular, la inminente elusión de las normas en el gran banco italiano Monte dei Paschi di Siena y los nuevos subsidios bancarios recién aprobados deben ser examinados por el Parlamento Europeo. El grupo de los Verdes/ALE impulsaremos todas las medidas parlamentarias necesarias para asegurar un escrutinio exhaustivo.”