La Comisión Europea y el Gobierno italiano están a punto de acordar el rescate del banco italiano Monte Paschi Di Siena (MPS). Desde el año 2016, no se permiten rescates bancarios sin garantizar la responsabilidad de los acreedores cubriendo por lo menos el 8% del pasivo total antes de que se puedan utilizar fondos públicos. El Gobierno italiano ha estado presionando a la Comisión Europea para permitir una excepción general a esta regla establecida en la Directiva de Recuperación y Resolución de Bancos (BRRD por sus siglas en inglés), y pretenden utilizar la conocida como “recapitalización cautelar”. Esto evitaría que los grandes acreedores del banco y de los grandes depositantes que podrían verse afectados en caso de aplicación plena de la BRRD tengan que cubrir parte del capital. Sólo debían respetarse las normas europeas sobre ayudas estatales para el sector financiero, mucho más laxas.
Los eurodiputados del grupo Verdes/ALE Sven Giegold y Ernest Urtasun, han comentado:
“Si la Comisión Europea y el Gobierno italiano cierran un acuerdo en esta línea estarían socavando las normas europeas recientemente aprobadas para proteger a los contribuyentes y evitar más rescates de bancos con dinero público. Se trata de una violación inaceptable de las líneas divisorias que hemos construido entre gobiernos y bancos y debilitará la confianza en la unión bancaria”.
“La Comisión Europea está a punto de legitimar este incumplimiento de la legislación de la UE ya que el BRRD sólo permite recapitalizaciones cautelares, si un banco es solvente y si se excluye la cobertura de las pérdidas. Monte Paschi Di Siena tiene un grave problemas de morosidad en sus préstamos que no dejan de ser pérdidas que no han sido provisionadas. Por lo tanto, la Comisión Europea como guardián de los tratados, debe rechazar la recapitalización cautelar de Monte Paschi Di Siena. La Comisaria Vestager debería defender la credibilidad de la unión bancaria y resistir cualquier presión para permitir una recapitalización interna (bail-in) más limitada bajo las normas sobre ayudas estatales para el sector financiero. La presión del BCE sobre la Comisión Europea para suavizar las reglas de recapitalización interna son inaceptables”.
“También consideramos que crearía un doble rasero inaceptable la idea del gobierno italiano de aplicar las normas de BRRD sólo a los bonistas junior y excluir a los grandes acreedores y depositantes quienes serían rescatados con dinero público”.
“Pedimos el pleno respeto de la Directiva y que se evite el uso de fondos públicos para rescatar bancos. Las normas de BRDD deben ser plenamente respetadas y cualquier solución debe evitar el uso de fondos públicos”.
“Dado que la resolución de MPS afectaría a muchos pequeños titulares de bonos que fueron engañados con deuda de riesgo de su propio banco, similares a las participaciones preferentes o la deuda subordinada, apoyamos firmemente que los ciudadanos deben estar protegidos de asumir pérdidas. Instamos a la Comisión y al Gobierno italiano a asegurar una compensación para evitar repetir en Italia lo sucedido en España, donde los ciudadanos afectados por la venta fraudulenta de participaciones preferentes perdieron todo su dinero por un importe total de 13.000 millones de euros después de capitalizar sus bonos. También creemos que en los casos de venta fraudulenta no debe haber una compensación máxima de 100.000 € como se propone. Se debería asegurar el total de los ahorros de las personas afectadas por una venta fraudulenta y esto puede hacerse respetando plenamente la legislación europea”.