“Les instamos a rechazar la estrategia de chantaje de Turquía y a tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad y la protección internacional de las personas migrantes y refugiadas desde que abandonan sus hogares en Idlib (Siria) hasta que llegan a territorio europeo”, exige la carta remitida por Idoia Villanueva, Mª Eugenia R. Palop, Miguel Urbán, Sira Rego, Manu Pineda y Ernest Urtasun, junto a más representantes de la izquierda europea.
El documento pide que cese la violencia en la frontera (incluso contra familias con menores), se restituya el sistema de asilo en Grecia y se establezcan vías legales y seguras de acceso a la UE. También insta a la Comisión a “presionar por la activación de la Directiva 2001/55/CE, para la protección temporal en caso de afluencia masiva de personas desplazadas”.
“Esto no es un asunto nacional que deba ser manejado únicamente por Grecia, ni un asunto meramente bilateral entre esta y Turquía”, señala el escrito. “Necesitamos un plan basado en el reparto equitativo de las responsabilidades entre todos los Estados Miembros y en cumplimiento de la Convención de Ginebra y el derecho internacional de los derechos humanos”.
Esta misma tarde, los ministros de Interior de los 27 se han reunido de urgencia en Bruselas para abordar la crisis en la frontera grecoturca. Este martes, 60 eurodiputados y eurodiputadas de distintos grupos políticos ya se dirigieron al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y a la comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, expresando su preocupación y exigiendo el cumplimiento de las leyes internacionales en materia de asilo.
El acuerdo firmado con Turquía en 2016 es una vergüenza para la Unión Europea, que mantiene a sueldo a un Estado que ejerce de carcelero para impedir a toda costa la llegada de personas migrantes y refugiadas a suelo europeo. Es intolerable que la presidenta de la Comisión agradeciese a Grecia, en su viaje hace unos días, que sea “el escudo europeo”. Un escudo contra el avance de personas que huyen de la guerra y la miseria. El sufrimiento humano y la inestabilidad de la región no pueden verse agravados por la errática política exterior del Gobierno de Erdoğan.
Puedes consultar la carta aquí.