El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) publicó ayer (3 de octubre) una nueva investigación internacional sobre la evasión fiscal y el blanqueo de capitales. Las revelaciones se basan en la mayor filtración de datos fiscales de la historia, el que han colaborado 600 periodistas de 117 países, analizando 11,9 millones de documentos filtrados prevenientes de 14 proveedores de servicios financieros. Los nombres de numerosas celebridades, políticos y multimillonarios aparecen en esta filtración, más de 330 políticos y cargos públicos (90 de ellos europeos), 15 jefes de Estado de América Latina entre actuales y retirados, 46 oligarcas rusos, 133 millonarios de la lista Forbes y 601 españoles y 751 sociedades offshore ligadas a dueños o empresas con direcciones en territorio español. De momento solo ha transcendido el uso de estos mecanismos fraudulentos por parte de la familia real, Pep Guardiola, Julio Iglesias y Miguel Bosé. Los documentos demuestran que la evasión fiscal y los delitos financieros a gran escala a través de empresas ficticias y fideicomisos siguen siendo habituales, a pesar de las normas que se han impulsado como reacción a revelaciones como los Papeles de Panamá.

Ernest Urtasun, eurodiputado de En Comú Podem y vivepresidente de los Verdes/ALE en el Parlamento Europeo, comenta:

“Este escándalo fiscal demuestra, fundamentalmente, dos cosas: en primer lugar, las prácticas fraudulentas de evasión fiscal son extremadamente habituales entre personas de ingresos elevados. En segundo lugar, las normas que hemos desarrollado en reacción a escándalos similares, tanto a nivel internacional y europeo como nacional, siguen siendo insuficientes.

Nunca antes nos habíamos encontrado con una filtración con tantos nombres en posiciones de poder, cosa que nos obliga a una reacción mucho más contundente. Ya hemos pedido que se incluya un debate en la próxima sesión plenaria y exigiremos sesiones en las comisiones de Economía y la subcomisión de Asuntos Fiscales, este caso debe suponer un antes y un después en la ambición de las normas respecto a la lucha contra el blanqueo y el intercambio de información.

En estas revelaciones vemos el papel central de los bufetes de abogados como facilitadores de las estructuras fraudulentas que permiten la evasión fiscal. En concreto, el papel desempeñado por Baker McKenzie, la firma más grande de Estados Unidos, es muy similar al de PwC en el escándalo de los LuxLeaks. Estados Unidos no se adhirió las normas de la OCDE de intercambio de información y en su lugar continúa con su propia norma FATCA, en virtud de la cual, no comparte información sobre la propiedad efectiva de los activos propiedad de ciudadanos no estadounidenses.

En la UE vemos como las normas contra el blanqueo y la cooperación administrativa no se transponen correctamente por parte de los estados miembro, pero la Comisión sigue sin abrir procedimientos de infracción. Diferentes normas nacionales, como la amnistía fiscal de Rajoy han permitido e incluso fomentado el fraude internacional. Por eso necesitamos normas más estrictas que garanticen una total transparencia y un mayor intercambio internacional de información. Las autoridades fiscales también deben poder gravar los ingresos de capital procedentes del extranjero en el caso de fideicomisos y empresas ficticias. Hoy en día, las normas internacionales dificultan la evasión de impuestos en el caso de las cantidades más pequeñas, pero las personas con más recursos pueden evitar el pago de sus contribuciones fiscales. Los avances en la política fiscal internacional no son suficientes, el impuesto mínimo global será un avance muy importante, pero sólo se aplicará a las grandes empresas y no a nivel individual a los más ricos. Por eso necesitamos total transparencia internacional sobre los verdaderos propietarios de las empresas ficticias que solo sirven para gestionar bienes inmuebles y no tienen actividad económica real. La reforma de las normas contra el blanqueo que estamos actualmente tramitando en el Parlamento Europeo será la mejor oportunidad para hacerlo.”