La Comisión ha publicado hoy su propuesta legislativa sobre la reducción de los riesgos de deforestación y degradación forestal asociados a todos los productos del mercado de la UE. La propuesta forma parte del paquete de medidas sobre el suelo, el traslado de residuos y la deforestación y exigirá a las empresas que garanticen que sus productos vendidos en la UE no proceden de zonas en las que los bosques se han degradado o han sido talados en su totalidad para la producción agrícola.
El grupo de los Verdes/ALE, aunque celebra que la iniciativa de la Comisión incluya por primera vez un sistema de diligencia debida, considera que esta propuesta es insuficiente y pide que se refuerce para garantizar la protección de los ecosistemas y los derechos humanos.
La eurodiputada Heidi Hautala, vicepresidenta del Parlamento Europeo, miembro de la comisión de Derechos Humanos y de la comisión de Comercio Internacional, ha comentado:
“En la lucha contra la deforestación, es importante tener en cuenta no sólo la conservación de la naturaleza, sino también el respeto de los derechos humanos, especialmente los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades locales. En lo que respecta a los derechos humanos, la propuesta de la Comisión exige el cumplimiento de las leyes del país de producción, pero si las leyes no incluyen un nivel suficientemente alto de respeto a los derechos humanos, no habrá mucha diferencia. Las normas internacionales de derechos humanos tienen que ser el punto de partida.
“Otra cuestión muy importante es qué materias primas y productos están cubiertos por la ley. Actualmente sólo están en la lista la carne de vacuno, el cacao, el café, el aceite de palma, la soja y los productos madereros, pero hay varios otros productos que tienen un impacto negativo en la deforestación. Hace tiempo que pedimos a la Comisión que incluya en la propuesta otras carnes además de la de vacuno, el caucho y el maíz”.
El eurodiputado Ville Niinistö, miembro de la comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria, ha comentado:
“La destrucción de la selva amazónica ha hecho que muchos tomen conciencia de la necesidad de proteger los bosques del mundo. Durante la COP26, más de 100 países se comprometieron a detener la deforestación para 2030 y es importante que esta nueva ley de la UE contribuya a ese acuerdo. Pero la propuesta de la Comisión contiene demasiadas lagunas. Para preservar la biodiversidad de nuestro planeta, no basta con centrarse solo en los bosques, sino que también hay que proteger otros ecosistemas como las sabanas, los humedales y las turberas. La Comisión se queda corta en este aspecto.
“La deforestación no es sólo un problema de los países tropicales, también debemos cuidar bien nuestros propios bosques. Los países europeos no tienen credibilidad para exigir que se detenga la deforestación en otros lugares si no estamos dispuestos a poner de nuestra parte para defender nuestra propia naturaleza.”
Más:
La UE es el segundo importador mundial de madera tropical y emisiones asociadas, después de China. Actualmente, la Unión Europea es responsable del 16% de la deforestación inducida por el consumo de productos como la soja.
Lea la propuesta de Reglamento de la Comisión sobre productos libres de deforestación.