El escándalo de los acuerdos fiscales CumEx (así como CumCum/CumFake) pueden haber causado una pérdida fiscal de al menos 150.000 millones de euros a nivel global en los últimos 20 años, según la investigación periodística del centro de investigación Correctiv. Sólo en España ascienden a entre 10.427 y 18.889 millones, según las cifras del estudio de la Universidad de Mannheim.
Ernest Urtasun, eurodiputado de En Comú Podem y vicepresidente del grupo de los Verdes/ALE en el Parlamento Europeo, ha Comentado:
“Las cifras del escándalo CumEx que hemos conocido hoy son escandalosas, hemos perdido 20.000 millones sin poder hacer nada para evitarlo, es el mayor robo de impuestos en la historia europea. Es inaceptable que todavía no esté claro hasta qué punto estas operaciones de arbitraje de dividendos o lavado de cupón son ilegales o no. Hay que aclarar urgentemente este robo de impuestos, si continúa y en qué condiciones y dar una respuesta europea coordinada para evitarlo.
Se demuestra una vez más que hoy en Europa tenemos un problema de doble no-imposición. Aunque este caso llega mucho más allá, ya que directamente se produce la devolución de algo que no se ha llegado a pagar.
La cooperación entre estados miembro es esencial para acabar con estos esquemas fraudulentos, y se deben impedir todos los obstáculos que las autoridades fiscales y las haciendas nacionales tienen para investigar más allá de sus fronteras. Por eso, el grupo Verdes/ALE hemos solicitado la celebración de una sesión monográfica sobre este escándalo en el Parlamento Europeo”.
Antecedentes:
Tanto CumEx como CumCum aprovechan la limitación fiscal al pago de dividendos. Las empresas se hacen cargo temporalmente de acciones de una empresa extranjera. Cuando se pagan los beneficios de la empresa extranjera (dividendos), a la empresa local se le devuelve el impuesto sobre las plusvalías; la empresa extranjera no tiene derecho a hacerlo o sólo lo tiene de forma muy limitada en virtud de un convenio de doble imposición. De este modo, el Estado se ve defraudado por el impuesto sobre las plusvalías reembolsado.
En CumEx, los paquetes de acciones fueron negociados por varios actores en torno a la fecha de registro de los dividendos. En consecuencia, no era evidente para Hacienda qué parte había recibido finalmente los dividendos y, por tanto, tenía derecho a la devolución de la retención pagada.